domingo, 8 de marzo de 2015

Te enamoras de las amapolas



2010 10 15

Te enamoras de las amapolas
en campo de trigo con la facilidad
con la que un buen catador de vinos
resuelve el dilema de un Peñascal
o un Don Simón, nada despreciable.

Te alarma la seguridad
con la que un artista llama arte
a un montón de sillas enormes
y tú no te atreves ni a mirar
a los ojos a una mujer bella
sin ruborizarte para preguntarla
si puedes hacerla un retrato.

Creo que seguir siendo así

es un honor. Aunque incomode.

No hay comentarios:

Publicar un comentario