2015 03 08
Terapias mal llevadas que azuzaron mi destino al más
decrépito de los taxis de la ciudad, sin rumbo fijo; sin móvil y sin cartera
para pagar.
¡Putas ganas de seguir el show!
El viaje ha sido tan rápido como intenso.
Un vino con los "amigos" en un bar, a modo de
despedida y le cojo. El show, en este caso; no debe continuar. Ya no valgo
ni para mono de feria, el espejo se rompe en añicos cuando mi perfil se asoma y
no me atrevo ni a mirar. No quiere reconocerme como soy ahora.
Prefiero el recuerdo. ¡Oh capitán, mi capitán! Aunque sea
éste el que me haga viajar a un sinsentido, aunque sea éste el que me haga
alcanzar mi última meta, tan pueril y decrépita.
Claro que me acuerdo de todos vosotros. Por vosotros tomo
este taxi. Claro que os quiero y me odio a mí mismo por ello. No merezco vuestro
amor, vuestra preocupación desmedida. No merezco más que el acompañamiento de
este taxista bolivariano, que no sabe nada de mí; en el cual encuentro la paz
para éste, último trayecto. Sin esfuerzos, porque no tengo fuerzas. Sin
preguntas, porque no tengo respuestas.
Un último trayecto, con una única meta. La paz. Mi paz.
Esa paz que no conseguí alcanzar desde que me jubilaron. Esa
paz que se me negó por mala fortuna. Esa paz que yo quería para vosotros y que
no alcancé a lograr ni de lejos.
Espero no causar muchos problemas. Espero que me entendáis.
Espero no dar mucho que hablar y respetéis mi decisión. No tengo excusas, soy
un cobarde. Me rindo. No es mi estilo pero a todas luces no soy ya, ni de
lejos, el número 4 del Fórum (o el 5). ¡Qué más da!
PD: ¿o sí, quién sabe? Sólo espero que
no me recordéis por esto. Gracias por estar ahí desde siempre. Os quiero.
#valladolidconlalo
No hay comentarios:
Publicar un comentario